Tarte à l'oignon et au fromage: Tarta de cebolla y queso, sabrosa y reconfortante

La tarte à l'oignon et au fromage, o tarta de cebolla y queso, es un plato clásico de la cocina francesa que combina sabores intensos y reconfortantes. Esta deliciosa tarta se caracteriza por su base crujiente de masa quebrada y su relleno suave y cremoso de cebolla caramelizada y queso derretido. Es una opción perfecta para una comida o cena en familia o para sorprender a tus invitados con un plato tradicional y lleno de sabor.

La tarte à l'oignon et au fromage es un plato muy popular en la región de Alsacia, en el noreste de Francia, donde se le conoce como "Flammekueche". Esta región es famosa por su rica tradición culinaria, y esta tarta es uno de sus platos más emblemáticos. Además, la combinación de cebolla y queso es una combinación clásica en la cocina francesa, que se utiliza en muchas recetas tradicionales.

Para preparar esta deliciosa tarta de cebolla y queso para cuatro personas, necesitarás los siguientes ingredientes:

- 1 lámina de masa quebrada
- 4 cebollas grandes
- 200 gramos de queso gruyère rallado
- 200 ml de nata líquida
- 2 huevos
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva

Comienza precalentando el horno a 180 grados Celsius. Mientras tanto, pela y corta las cebollas en rodajas finas. En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade las cebollas. Cocina a fuego medio-bajo durante unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que las cebollas estén caramelizadas y suaves.

Mientras las cebollas se cocinan, extiende la lámina de masa quebrada en un molde para tarta previamente engrasado. Pincha la base con un tenedor para evitar que se hinche durante la cocción. Hornea la base de la tarta durante unos 10 minutos, hasta que esté ligeramente dorada.

En un bol aparte, bate los huevos y añade la nata líquida. Mezcla bien y sazona con sal y pimienta al gusto. Reserva.

Una vez que las cebollas estén caramelizadas, repártelas sobre la base de la tarta pre-cocida. Espolvorea el queso gruyère rallado por encima de las cebollas. Vierte la mezcla de huevos y nata sobre la tarta, asegurándote de que se reparta de manera uniforme.

Vuelve a introducir la tarta en el horno y hornea durante unos 25-30 minutos, o hasta que esté dorada y cuajada.

Una vez lista, retira la tarta del horno y déjala reposar durante unos minutos antes de servir. Puedes disfrutarla caliente o a temperatura ambiente, acompañada de una ensalada fresca.

Esta tarte à l'oignon et au fromage es un plato muy completo y equilibrado desde el punto de vista nutricional. La cebolla es rica en antioxidantes y fibra, mientras que el queso aporta proteínas y calcio. La masa quebrada, aunque calórica, aporta energía y carbohidratos. Además, al hornear la tarta en lugar de freírla, se reduce el contenido de grasa. Sin embargo, es importante recordar que este plato debe consumirse con moderación, ya que puede ser alto en calorías debido al queso y la masa.

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